El Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) controla y fiscaliza las medidas de bioseguridad que se aplican contra la gripe aviar en municipios de los departamentos de Tarija y Santa Cruz, para prevenir el ingreso de la enfermedad.
“La Jefatura Departamental de Tarija realizó la fiscalización de vacunación contra la influenza aviar en el municipio de #Caraparí, con el objetivo de prevenir el ingreso de la enfermedad a nuestro Estado Plurinacional de Bolivia”, informó el Senasag mediante sus redes sociales.
La institución lleva a cabo esa labor en cumplimiento a la Resolución Administrativa N°047/2024, que declara “Estado de Alerta Zoosanitaria ante la amenaza de ingreso de la influenza aviar que afecta al sector productivo”.
Asimismo, el Senasag llevó a cabo controles sanitarios en comercios y ferias de aves de los municipios cruceños de Santa Cruz de la Sierra, El Torno y Montero, para verificar la no existencia de aves enfermas.
Además de la vigilancia serológica en Influenza Aviar y Newcastle y la promoción en el cumplimiento de las medidas de bioseguridad en la manipulación, traslado y transporte de las mismas.
La entidad desarrolló esos trabajos en coordinación con los gobiernos autónomos municipales de dichas regiones y el Servicio Departamental Agropecuario del Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz (Sedacruz), en aplicación del “Plan de alerta zoosanitaria temprana contra la influenza aviar”.
Apuntes
Tras estudios de laboratorio, el 27 de enero de 2023 se confirmó el brote de gripe aviar de alta patogenicidad en una granja de aves de postura (gallinas ponedoras de huevo) en el municipio de Sacaba, del departamento de Cochabamba.
Ante ello, el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras (MDRyT), junto con el Senasag, declaró emergencia zoosanitaria en Bolivia y activó un plan, que cumplió con los parámetros internacionales, para controlar y erradicar la enfermedad.
En mayo de ese año, el Senasag informó que el Gobierno nacional invirtió Bs 8,9 millones para combatir la gripe aviar mediante un “fuerte y aguerrido plan”, por lo que la enfermedad está controlada, no hay nuevos brotes y la producción avícola está en proceso de recuperación.
Ya en junio también de 2023, el Gobierno nacional creó un fideicomiso de hasta Bs 22 millones para financiar con créditos la reactivación de los productores de gallinas de postura comercial afectados por la influenza aviar de alta patogenicidad en Cochabamba, en el primer trimestre de ese año.
La enfermedad en Bolivia ocasionó la pérdida de unas 590.000 aves, entre muertas y sacrificadas, cifra menor respecto a otros países de la región como Ecuador, que registró el deceso de 1,3 millones de aves, según los datos oficiales. /ABI/